Observaciones

• No forzar la entrada de fluidos para liberar una obstrucción. No se puede garantizar el funcionamiento correcto de un sistema en el que la infusión se realice con dificultad y sea imposible obtener flujo hemático. 
• Nunca inyectar líquidos a través del reservorio con jeringas menores a 10, para evitar el exceso de presión sobre el catéter.
• La presión ejercida al inyectar y extraer debe ser suave.
• No se recomienda dejar parada la infusión. 
• No manipular la aguja ni realizar movimientos de rotación o inclinación, una vez insertada en la membrana. 
• Lavar el catéter entre distintas medicaciones; numerosas sustancias pueden precipitar el contacto con la heparina y producir una obstrucción irreversible del catéter. Lavar el catéter siempre con 20 cc después de extracciones, administraciones de hemoderivados y administración de sustancias lipídicas y con 10 cc el resto de medicaciones. 
• Mantener siempre la pinza cerrada mientras se desconecta el sistema.
• Cambiar llaves, conectores de presión positiva y sistemas cada 7 días para prevenir complicaciones y siempre que estén visiblemente sucios o en caso de desconexiones accidentales. Registrar fecha del cambio del sistema de infusión. 
• Cambiar los sistemas utilizados para administrar emulsiones lipídicas a las 24 horas del inicio de la infusión. Si no fue posible acabar la perfusión de fluidos
• Cambio de aguja y bioconector al realizar hemocultivos, si aparecen signos de irritación o infección, dificultad en la infusión o extravasación.
• No utilizar el reservorio para la administración de contrastes, ya que se pueden romper.